¿Qué son los Dark Patterns? Se trata de un conjunto de técnicas o herramientas que surgieron para mejorar las experiencias de las personas cuando interactúan con servicios o productos digitales, pero que también son utilizadas para engañar a usuarias y usuarios, a modo de obtener beneficios a costa de su buena fe. Se las conoce como “dark” u oscuras, no solo porque no son éticas, sino porque la persona afectada no es consciente de la manipulación.
Los Dark Patterns aparecieron en pleno boom de los websites de e-commerce cuando las empresas empezaron a utilizar estas técnicas para inducir a usuarias y usuarios a realizar compras que no deseaban o suscribirse a servicios cuyo costo no estaba claramente expuesto o de los cuales era casi imposible darse de baja, entre otros objetivos deshonestos. Con el paso del tiempo, estas prácticas se extendieron a otras plataformas digitales como redes sociales, juegos y aplicaciones móviles, con el objetivo de capturar y mantener la atención de las personas, recopilar datos personales y mostrar anuncios.
Con la llegada de la pandemia y el aislamiento obligatorio, los Dark Patterns tomaron mayor protagonismo, si se tiene en cuenta el crecimiento del comercio electrónico en los últimos meses. Según indican desde la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), las ventas por internet aumentaron un 84% en abril, en comparación con un mes promedio del primer trimestre del 2020, así como un crecimiento del 38% en órdenes de compra y un 71% en unidades vendidas. Asimismo, durante las primeras tres semanas de la cuarentena las ventas online de los supermercados, por ejemplo, crecieron un 300% en relación con las tres semanas previas al inicio del aislamiento. Es decir que en dos meses se logró lo que hubiera demandado dos años.
Un estudio realizado por la consultora Kantar en abril de 2020 reveló que el 31% de los argentinos declaraba haber incrementado sus compras online, es decir, 12 puntos más que en la medición realizada a fines de marzo, apenas se instaló la cuarentena. En paralelo, el uso de tarjetas y medios de pago digitales experimentó un fuerte crecimiento y el 76% de sus usuarios actuales afirma que optará por este canal en el futuro.
Todo este crecimiento del entorno digital hizo que aumenten las posibilidades de sufrir pérdidas monetarias, engaños, invasión a la privacidad o la reducción de la capacidad de tomar decisiones de modo independiente.
De todos los Dark Patterns que podemos encontrar cuando navegamos, usamos aplicaciones o jugamos, los relacionados con la violación a la privacidad y los datos personales son los más insidiosos. Y es por esto que gobiernos y agencias gubernamentales de todo el mundo están adoptando medidas para la protección del derecho a la privacidad y la protección de datos en el ámbito digital. El saber cómo funcionan los Dark Patterns es el mejor modo que tenemos de defendernos y de evitar ser víctimas de la manipulación. Debemos tener presente que nos afectan a todo el mundo, pero hay sectores más vulnerables, como niñas/os y adolescentes, personas mayores, personas con discapacidades varias, personas con patologías de adicción (jugadores, compradores compulsivos) que pueden verse severamente afectadas tanto en lo monetario como en lo emocional.
Las empresas del mundo del diseño y la tecnología tenemos un rol fundamental y es el de difundir y educar sobre estas técnicas y estrategias oscuras, que es la mejor manera de luchar contra ellas. Informando, denunciando y aconsejando siempre, podremos guiar a usuarias y usuarios hacia un uso avisado y consensuado de la tecnología.