A nivel global las pérdidas por desastres naturales durante el primer semestre del año, se situaron por debajo del promedio de los últimos 10 años, tal como reflejan los datos ofrecidos por el Impact Forecasting de AON Benfield, que publicó el 22/07/15 en su ‘Global Catastrophe Recap’, así lo señala una nota de FIDES.
Las pérdidas económicas fueron de 46.000 millones de dólares, es decir, un 58% menos respecto al promedio de la última década, que fue de 107.000 millones de dólares. En cuanto a las pérdidas aseguradas quedaron en 15.000 millones, un 47% menos respecto a la media de los últimos 10 años, que alcanzaron los 28.000 millones.
El seguro cubrió económicamente un 31% de las pérdidas globales. A diferencia del año anterior, esta cifra superior a la media de los últimos 10 años, que está en un 27%, debido a que la mayoría de las pérdidas se produjeron en las regiones con mayor penetración de seguros.
Por otro lado, uno de los desastres más costosos a nivel global fueron las tormentas que comprenden el 33% de las pérdidas económicas y el 49% de la pérdida asegurada.
La primera mitad de 2015 ha sido más tranquila tanto desde una perspectiva del coste económico como en pérdidas asegurada desde 2006. Los eventos en estos primeros seis meses del año en gran parte son manejables para que los gobiernos y la industria. De cara al futuro, en lo que queda de año hay que vigilar el continuo fortalecimiento del fenómeno climático de El Niño, que está a punto de suceder ahora y que podría tener impacto en todo el mundo. Nos preguntamos cómo se traducirá estas pérdidas por desastres, pero es algo sobre lo que tenemos que establecer una estrecha vigilancia en los próximos meses”. Para Steve Bowen, director asociado y meteorólogo del equipo de Impact Forecasting,