En París, los ciclistas pasan por alto la luz del semáforo y en vez de castigarlos con una multa para que cumplan con las leyes de tránsito, lo que hicieron las autoridades parisinas fue legalizarlo, de acuerdo a una nota publicada por el diario La Nación.
Entre julio y agosto, se colocaron nuevas señales en los semáforos de la capital con un triángulo al revés y una bicicleta en el centro. Cuando la luz de semáforo esté en rojo, los ciclistas pueden seguir con precaución.
Esta (medida) requeriría rescribir el Code de la Route (leyes de tránsito) pero lo que en efecto hemos hecho es convertir la luz roja en una señal de paso para ciclistas», explica Christophe Najdoski, responsable de transporte de París.
Hay que acotar que estos cambios sólo afectan el cruce a la derecha o cuando el cruce continúa la línea de la acera.
También es una forma de regularizar una práctica ya extendida y que no tiene sentido tratar de evitar. Siempre y cuando el ciclista reduzca la velocidad, y si hay peatones tienen que parar, es perfectamente seguro continuar», agrega la responsable del transporte.
La norma de la luz roja forma parte de una serie de medidas diseñadas por la alcaldía de la ciudad para aumentar el uso de bicicletas. En París, se han creado nuevas rutas de bicicleta y unos 10.000 lugares más para estacionarlas.
El objetivo es que del 5% de los viajes en bicicleta que se hacen hoy en día, pase a un 15% para el 2020.
«En las ciudades francesas el 40% de los desplazamientos en auto es de menos de 3km. Estos viajes fácilmente se pueden hacer en bicicleta, así que lo tenemos que hacer es que las personas vean natural tomar escoger las bicicletas como modo de transporte», señala Najdoski.
El promedio de muertes por accidentes en bicicletas en París es de cinco al año, una cifra que no cuenta los accidentes fuera de la periferia.