El metaverso está en plena expansión. Según un análisis de Bloomberg, el mismo podría significar un mercado de US$ 783.300 millones para 2024. Aunque el concepto de metaverso existe desde hace tiempo, recién ahora las capacidades tecnológicas y la aceptación de los consumidores se están poniendo al día. Pero ¿cuántos consumidores saben lo que esto significa actualmente?
La “Encuesta de Pulso del Consumidor” de KPMG realizada este año a 1.000 consumidores, mostró que existe una creciente adhesión a este ambiente virtual: el 86% de la Generación Z y el 81% de los millennials afirman estar familiarizados con él. Asimismo, el informe de KPMG realizado a partir de los resultados de esta encuesta denominado “Saltar al metaverso con audacia, no a ciegas. Un nuevo mundo para los consumidores”, destacó las tendencias en el uso de las nuevas tecnologías de interacción, los ejemplos de diversas empresas en todo tipo de sectores (el seguro, desde ya, no es la excepción) y las claves para diseñar un plan de acción para ingresar al metaverso con seguridad.
Familiaridad del metaverso con los consumidores
Muestra total de consumidores
Fuente: Informe KPMG
Los consumidores llegan al metaverso
Según el informe de KPMG, los consumidores están dispuestos a gastar dinero real en estos mundos virtuales. El metaverso conjuga el mundo físico y virtual de los consumidores a través de la socialización, los juegos, las compras, el fitness, la educación, el trabajo, la educación y el entretenimiento, o simplemente se utiliza para pasar el rato con los amigos. En pocas palabras, el metaverso consiste en unir a las personas de formas nuevas e inimaginables.
Fuente: Informe KPMG
Nuevas interacciones, nuevos negocios
El metaverso reúne a las personas para compartir momentos de interacción a través de avatares e identidades digitales. El entorno virtual utiliza tecnologías avanzadas para involucrar y absorber completamente los sentidos, alterando la percepción de la persona para crear la suposición de un entorno real. Es así como las experiencias inmersivas establecen una conexión emocional directa entre las marcas y los consumidores que permiten aumentar la base de clientes, fomentar la fidelidad y la relevancia de la marca, y generar nuevas fuentes de ingreso con tiendas e influencers virtuales, ventas de NFTs y transacciones con criptomonedas.
“El informe revela que las oportunidades de escalar en el metaverso son enormes. Ejemplos como Nikeland de Nike, las simulaciones de productos en el hogar de Ikea y Amazon, la experiencia de prueba virtual ‘Choose My Model’ de Walmart, entre otros, son clara evidencia de las potencialidades de este nuevo ambiente. La demanda de artículos de lujo, por ejemplo, podría alcanzar los US$ 50.000 millones en el metaverso para 2030. Creo que es hora desarrollar estrategias específicas y capacitar equipos para subirnos a esta nueva tendencia”, afirma Fernando Gamboa, socio líder de Consumo y Retail de KPMG en América del Sur.
Y para Eduardo Harnan, socio líder de la Industria de Consumo y Retail en KPMG Argentina, “la evolución del Metaverso como un nuevo canal de promoción, interacción con consumidores y ventas evolucionará más rápido de lo que podemos imaginar según el informe de KPMG, y será una pieza importante en el desarrollo de la estrategia de crecimiento de las compañías, impulsado por la revolución tecnológica que trae aparejado nuevas formas de comunicación y relación entre los distintos participantes del mercado. ”
Mirando al futuro
De acuerdo al reporte, las posibles oportunidades del metaverso parecen infinitas, por lo que su llegada enciende una sensación de urgencia para sumarse a él. Sin embargo, la urgencia no tiene que ver tanto con la ejecución inmediata, sino que con averiguar el impacto que tiene en las marcas y las posibles oportunidades disponibles. Si el metaverso presenta oportunidades que tienen un impacto directo en una empresa, vale la pena captar el momento. La urgencia debe estar impulsada por la decisión de lo que el metaverso puede significar para la marca y por la reflexión sobre la habilitación de una estrategia a largo plazo. El objetivo es saltar al metaverso con audacia, no a ciegas.