El Covid-19 está cambiando los patrones de comportamiento humano y del consumidor de forma permanente. La peste negra contribuyó a terminar en gran parte con el feudalismo, mientras que en 1918, la gripe española llevó al nacimiento de la atención médica socializada y los planes de seguro basados en el empleador. Hoy, el escenario está listo para una reorganización completa en las empresas, industrias y economías.
La industria de la salud fue el sector que se vio más impactado por la pandemia. El sector experimentó una interrupción operativa inesperada y los hospitales privados registraron una caída sustancial en las pisadas de pacientes hospitalizados y ambulatorios y los procedimientos electivos. Según el medio Cio Economic Times, la situación fue el resultado del temor general de mantenerse alejado de estas premisas “aparentemente riesgosas”, incluso si los pacientes necesitaban diagnóstico, consulta o tratamiento para otras afecciones médicas.
Con la pandemia, el papel de la tecnología tomó mayor relevancia, tal es así que la telemedicina se ha convertido hoy en día en un aspecto esencial de la industria de la salud. Está ganando terreno en radiología, cardiología y salud conductual, lo que la convierte en un factor destacado en el desarrollo del segmento de la atención médica. Uno de los grandes cambios que nacen a partir de esta modalidad, es ver pacientes en hospitales y médicos en casa.
Según Cio Economic Times, la dramática transformación en los estilos de trabajo de los trabajadores de la salud requerirá sin duda una implementación más eficaz de tecnologías de virtualización. Los médicos y los profesionales del diagnóstico deben contar con herramientas avanzadas para operar equipos remotos, generar informes y administrar otros dispositivos críticos para la atención del paciente.
Pasado vs nueva normalidad
Si bien la comunicación de audio y video en tiempo real se había iniciado antes de COVID-19, su uso estaba restringido según las leyes médicas en todos los países. Sin embargo, esas reglas tuvieron que modificarse para abordar los desafíos repentinos que trajo el coronavirus. Varios países flexibilizaron sus regulaciones de telemedicina para que más pacientes pudieran ser examinados y tratados en línea.
En menos de cuatro meses, el total de consultas en línea para hospitales aumentó de 20 a más de 7,000 por día. Muchos de estos ahora involucran la experiencia de varios médicos y / o proveedores de servicios de salud que se unen para atender a un paciente. La nube, el análisis de datos y la inteligencia artificial son tecnologías clave en la telemedicina, ya que juegan un papel crucial en la generación de resultados exitosos.
Los beneficios de este tipo de tecnología son:
- El ahorro de tiempo al evitar los viajes a los hospitales siempre que sea posible
- La capacidad de administrar controles médicos en instalaciones que no pueden visitar personalmente y que pueden tener personal sin experiencia
- Mejores experiencias para los pacientes, dándoles el poder y la flexibilidad para elegir los hospitales o centros de diagnóstico donde quieren ser tratados.
- Confianza digital” con patrones cambiantes de experiencia del cliente
Es importante en estos tiempos difíciles que las empresas se centren fuertemente en los factores que generan su confianza en las marcas como lo es la empatía, la competencia y la integridad. Según Cio Economic Times, las grandes experiencias de los clientes se forman con un enfoque en la velocidad, conveniencia, consistencia y amabilidad de los servicios.
De esta manera, a medida que las empresas emplean tecnologías en evolución en sus industrias, necesitan humanizar sus esfuerzos y garantizar un equilibrio entre la personalización del servicio y la privacidad.