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Configurador de Productos en Seguros

Por Daniel Galanti, CEO de SysOne.-

Actualmente, la configuración de producto es un eje central para la diferenciación en el mercado de seguros. La capacidad de una compañía para  responder de manera satisfactoria a las demandas de los clientes y reducir así el tiempo de comercialización genera un fuerte impacto dentro de la organización. Incluso, en algunos casos, la ejecución de cambios periféricos o secundarios, como puede ser una modificación en la oferta de seguros, puede resultar una ardua tarea si se tiene en cuenta el escenario de gran parte de aseguradoras que cuentan con sistemas legacy/heredados que, por su naturaleza, se caracterizan por la segmentación, la falta de flexibilidad  y adaptación al cambio.

Esta tarea, por supuesto, requiere una visión tanto estratégica como operativa y, comúnmente, el hecho de plasmar ambas visiones origina un verdadero desafío. Los departamentos de desarrollo de productos están sometidos a una constante presión para crear nuevas y grandes ideas con potencial para convertirse en los próximos grandes «unicornios del mercado», y todo ello debe realizarse al mismo tiempo en que se aceleran los tiempos de comercialización, se incrementa la rentabilidad, se reducen los costes y se hace frente a un entorno regulatorio en constante cambio.

Es así como, frente a la detección de este panorama en la industria, en SysOne desarrollamos un potente Configurador de Productos integrado a nuestro ecosistema de arquitectura orientada a microservicios y modalidad Cloud, con el fin de ayudar a las compañías de seguros a  estructurar e implementar nuevos productos, como así también evolucionar los actuales, con mejores y más rápidos resultados.

Pero… ¿Cuál es el mayor beneficio que puede otorgar un Configurador de Productos en seguros?

Como se ha mencionado, uno de los grandes obstáculos que enfrentan las aseguradoras cuando incorporan o modifican productos, es el volumen de operaciones internas que se tienen que actualizar. Se deben llevar a cabo operaciones muy pesadas y desgastantes, y, con frecuencia, repetitivas en muchos ambientes o departamentos a fin de acoplarse a las nuevas estructuras de las pólizas que se pueden generar. Existen hasta casos donde esas actualizaciones deben emprenderse de forma particular en cada uno de los sistemas modulares como puede ser un portal de agentes, o de venta directa, prolongando de esta manera los tiempos del negocio y extenuando las energías de los colaboradores. Como consecuencia de esto, se torna muy difícil lanzar al mercado nuevos productos de manera rápida y eficiente.

Es así como un configurador de productos puede garantizar el desarrollo de aplicaciones con procesos ágiles que pueden cambiarse rápidamente y de forma universal. Por ejemplo, como parte de una plataforma integral, un sólido configurador puede transformar el proceso de desarrollo y creación de productos. De esta forma se deja atrás la concepción de modelos tradicionales, en los cuales esta etapa se cataloga como un cuello de botella, convirtiéndose en una herramienta de diferenciación y de liderazgo.

Asimismo, para que la inclusión de un configurador de productos (también denominado en algunas ocasiones como taller de productos) aporte realmente un valor agregado, debe contar con la capacidad de gestionar todos los ramos, sean individuales o colectivos, al mismo tiempo que contar con la flexibilidad para la parametrización y el cumplimiento normativo de cada región.

En esta variable es donde se empodera a la aseguradora, maximizando el control dentro de la organización. La misma podrá, de manera ágil y simple, por ejemplo escalar en ramos y/o modificar workflows de procesos establecidos en función de sus requerimientos. Podrá analizar los resultados que le brinda su plataforma integral y plasmarlos en su “lógica matriz” a la hora de evolucionar o crear nuevas soluciones. Incluso, en SysOne contamos con la posibilidad de incorporar análisis predictivos para seguros, con el objetivo de asistir entre otras cosas, a los procesos de prueba, a la generación de suscripciones inteligentes, a la maximización de machine learning o aprendizaje automático en función de casos, entre otros.

Ya es un hecho que el modelo tradicional de negocios ha quedado obsoleto, y, una plataforma unificada con un potente configurador de productos ayuda a evitar los silos operativos y facilitar la implementación simple de cambios y creación de pólizas de la compañía. La idea de invertir largos meses e incluso años para lanzar al mercado nuevos productos no puede ser una opción. Por un lado, el cliente final quiere cambios rápidos, exige que lo conozcas y que le ofrezcas seguros que se ajusten a su perfil, al mismo tiempo que demanda tener el control sobre sus contrataciones, y que éstas sean capaces de  modificarse en tiempo real si es que lo desea. Por el otro, las aseguradoras demandan sistemas que les permitan suplir las exigencias de sus usuarios, pero en el momento que éstos lo requieran. No pueden sentarse a esperar las miles de actualizaciones que conlleva cada cambio, quieren agilidad, quieren ser innovadores y generar más ventas, al mismo tiempo que un retorno de su inversión. En definitiva, quieren tener el control de sus sistemas, y poder crear nuevas estructuras dinámicas que satisfagan las necesidades de sus clientes. Necesitan salir rápido al mercado, y, si los resultados no son los esperados, también tener la capacidad para “fallar rápido” y “probar rápido” nuevos diseños mediante reglas, tablas, fórmulas y demás herramientas que sustenten su objetivo: seguir creciendo.

A modo de Conclusión

En definitiva, un configurador de producto encapsula toda la lógica y particularidad de los productos de una compañía, tanto estándares como especiales.

En SysOne como fieles a la premisa que, para fidelizar a nuestros clientes e incrementar nuestras oportunidades, es indispensable escuchar a los verdaderos protagonistas de la historia que son los usuarios clave de todas las áreas que conforman una compañía.

A partir de allí, unificar esta visión estratégica y operativa, donde el conocimiento y la tecnología, de la mano de un potente configurador de producto, se convierten en el corazón de las compañías aseguradoras dispuestas a ser parte del futuro del seguro.