El pasado 15 de julio se realizó una reunión de trabajo en el Ministerio de Agricultura junto al Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Gabriel Delgado, el Superintendente de Seguros de La Nación Lic. Juan A. Bontempo y las cámaras del sector, para analizar y trabajar la puesta en marcha del plan Gestión del Riesgo y Seguros en la Producción Agropecuaria.
Según informó la SSN en un comunicado, este proyecto es una iniciativa del Ministerio de Agricultura y el organismo que conduce Bontempo, en el marco de PEA y PlaNeS. El objetivo de la reunión fue poner en conocimiento el estado de situación, la implementación de instrumentos de política para la gestión y transferencia de riesgos del sector agropecuario, para poder firmar el convenio y avanzar sobre este proyecto en los próximos meses.
Se analizaron las diferencias regionales, el documento de las diferentes cámaras que elaboraron acerca del seguro agrícola, los riesgos catastróficos, el sistema índice, la mitigación y transferencia de riesgo. El objetivo es incrementar la participación de zonas y cultivos asegurados, es por eso que desde el Ministerio de Agricultura se realizaron compras en radares (3 este año) y se tiene estipulado comprar otros en el año siguiente. Estas inversiones serán una herramienta indispensable en la elaboración de los seguros paramétricos y de índices.
Este proyecto se enmarca en el plan estratégico de ambos organismos en el que ya vienen trabajando detrás del mismo interés político para potenciar el seguro agrícola. Para esto, se están planteando un mecanismo de participación y trabajo conjunto para poder tener un buen escenario de resolución de esta problemática.
La producción agropecuaria está expuesta a riesgos de la naturaleza fuera del control de los productores, por lo tanto toda esta información será concentrada en el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria), para que se considere fundamental que el sector cuente con distintas alternativas para elaborar estrategias de mitigación y transferencia de riesgos.
En este esquema, se desprende que el Estado debe estar presente en todo lo relativo a la regulación de los distintos instrumentos, a las posibilidades de acceso de los distintos tipos de productores y producciones, y en el apoyo económico para alcanzar la mayor cobertura de riesgos posible, en la planificación de diversos mecanismos de mitigación de riesgos (fomento a la fertilización, inversiones en riego), entre otros aspectos.
