Rumania se ha convertido en uno de los países líderes en la recuperación europea. Su crecimiento superó las expectativas, alcanzando un incremento del PBI del 3,5% en 2013. Los aportes más significativos correspondieron a los sectores agrícola e industrial, y especialmente a los fabricantes de automóviles destinados principalmente al mercado extranjero. Aunque Rumania no va a mantener este ritmo de crecimiento en 2014, las perspectivas siguen siendo positivas, indica COFACE en su «Reporte Panorama Ucrania».
2013: Un año de crecimiento
El crecimiento del PBI real de Rumania en 2013 superó las expectativas (3,5% interanual), alcanzando su pico más alto en el último trimestre del año, con un 5,1%. Los principales contribuyentes al crecimiento fueron las exportaciones (que registraron un fuerte aumento del 13,5%) y en particular las exportaciones de productos agrícolas y automóviles.
Rumania es el país que más depende de la agricultura en toda la Unión Europea, con casi el 31% de la población activa empleada en este sector. En consecuencia, su producción económica está fuertemente vinculada a las condiciones climáticas. En el verano de 2013, las cosechas fueron excelentes, originando shocks de oferta positivos. En 2013, la producción de bienes agrícolas de Rumania ascendió a 17.000 millones de euros (+ 25%), representando casi el 5% de la producción agrícola de la UE-28.
Además de las exportaciones de los cultivos, la producción de automóviles también desempeñó un papel importante en el comercio exterior de Rumania. Como los costos laborales de Rumania se encuentran entre los más bajos de la UE, el país es el favorito de los OEM (Original Equipment Manufacturers) para la ubicación de sus fábricas – principalmente Ford, pero también Renault, que ha inyectado nueva vida a la marca rumana Dacia. Las mejores perspectivas del sector automotriz internacional, junto con la capacidad de producción disponible de Rumania, generaron un valor añadido para el país.
Rumania registró una de las tasas de crecimiento del PBI más altas de toda Europa en 2013. El crecimiento del 3,5% superó significativamente a la recesión de la zona euro y al promedio de la CEE de 1,2%. Los principales contribuyentes a estos resultados positivos fueron la buena cosecha agrícola y el elevado nivel de exportaciones. Sin embargo, ninguno de éstos pueden ser considerados factores sostenibles. La recuperación de las economías avanzadas será favorable para el comercio exterior de Rumania, especialmente para su sector automotriz, aunque la situación interna del país continúe siendo una limitación«, explica Grzegorz Sielewicz, Economista de Coface para Europa Central.
Barómetro Sectorial
Transporte: uno de los pilares de la economía rumana
El sector del transporte en Rumania es un pilar importante de la economía nacional. El volumen del transporte de mercancías ascendió a 108% del PBI en 2012 – por encima de la media de 95% de la UE pero inferior a la mayoría de sus pares regionales. Bulgaria y Polonia registraron los porcentajes más elevados, con 174% y 137% respectivamente.
El sector del transporte ofrece perspectivas positivas, dada la creciente demanda de estos servicios – especialmente con la recuperación de la zona euro, el principal socio comercial de Rumania. Sin embargo, el incremento de la demanda de servicios de transporte no se traducirá directamente en un aumento de las ganancias netas para todas las empresas rumanas que operan en este sector. La intensa competencia puede generar una presión a la baja sobre los precios y la aceptación de márgenes más bajos en medio de unos gastos fijos estables. Coface prevé un nivel de riesgo medio para el sector del transporte.
Agricultura: una cosecha excelente en 2013
Rumania se vio favorecida por un incremento de la producción agrícola superior que en otros países de la CEE. Sin embargo, la contribución positiva de la agricultura no se puede considerar un factor permanente en la producción del país. Por el contrario, como se muestra en el barómetro sectorial, el sector agroalimentario presenta un nivel de riesgo medio, con muchas pequeñas empresas luchando por obtener beneficios, presionadas por los gastos fijos.
Respecto a los factores externos, Rumania puede sacar provecho de la crisis en Ucrania. Los recientes incidentes han creado una oportunidad para que Rumania se convierta en un actor relevante en el mercado de cereales de la cuenca del Mar Negro. Rusia y Ucrania son aún importantes productores de cereales en la región, produciendo cuatro y tres veces más que Rumania, respectivamente. Pero se prevé una caída de su producción para este año del 4% para Rusia y de hasta un 10% para Ucrania. Con una demanda global estable, Rumania podrá fortalecer sus capacidades de producción e influir sobre los precios de exportación.
2014: ¿Continuará el crecimiento en Rumania?
Coface prevé que en 2014 Rumania será una de las dos economías de la CEE (junto con Letonia) que no registrarán una mejora del ritmo de crecimiento del PBI. Es poco probable que se repitan las dinámicas de fuerte crecimiento, mientras que los efectos de base serán evidentes durante la segunda mitad del año. Para 2014 se prevé un crecimiento del PBI real del 2,5%. Este crecimiento acercará la economía rumana a la tasa de crecimiento promedio prevista para la CEE del 2,4%.
Las expectativas para la producción agrícola de 2014 son diversas, pero el escenario más realista parece ser que la cosecha será inferior a la de 2013. Las exportaciones continuarán siendo impulsadas por la demanda de automóviles nuevos, un sector que contribuye fuertemente al crecimiento de la industria rumana. La demanda interna también mostrará signos de mejora gracias al aumento del gasto de los hogares – pero que todavía estará limitado por el lento crecimiento del crédito. El crecimiento de las inversiones en activos fijos no aumentará en línea con el consumo privado, ya que las empresas todavía no están plenamente convencidas de la sostenibilidad de la recuperación económica.
El desempeño económico de Rumania en 2013 no se mantendrá en niveles tan sólidos en 2014, ya que los motores del crecimiento del año pasado no son sostenibles. Esto se ve confirmado por la recesión técnica de los dos primeros trimestres de 2014. Sin embargo, una tasa de crecimiento estable del 2,5% en el 2014 será sustentada por el significativo volumen de exportaciones hacia los países de la eurozona y el rebalanceo gradual de la economía nacional hacia la demanda interna», concluye Grzegorz Sielewicz, Economista de Coface para Europa Central