Los superintendentes de Riesgos del Trabajo de Argentina, Gustavo Morón y el de Seguridad Social de Chile, Claudio Reyes Barrientos consideraron ayer que la salud y la seguridad de los trabajadores “debe ser una estrategia de productividad”, un proceso que “debe ir acompañado de una necesaria modernización institucional”.
Morón y Reyes Barrientos participaron de una jornada de intercambio de experiencia sobre el funcionamiento de los sistemas de riesgos de trabajo en Chile y Argentina, que se realizó en el rectorado porteño de la Universidad Tres de Febrero y que fue organizado por la Superintendencia de Riesgos del Trabajo en el marco de los 20 años del sistema en Argentina.
Chile tiene un sistema de asociaciones mutuales sin fines de lucro, que son las que ofrecen cobertura a los trabajadores trasandinos en caso de accidentes de trabajo o enfermedades profesionales.
En este sentido, Reyes Barrientos destacó que la baja en la accidentabilidad que logró el país trasandino (de un 35% existente al momento de la creación del sistema, a fines de la década del ´60, pasó a un 3,7% en 2015) se debe a las grandes erogaciones presupuestarias que las Mutuas realizaron en concepto de prevención de los riesgos laborales.
Prevenir riesgos laborales genera mayor productividad en la economía”, dijo el funcionario chileno. Y agregó que “este proceso debe ir acompañado de una necesaria modernización institucional en nuestro país».
Ya en un formato de entrevista, Morón resaltó –en línea con el objetivo de su par chileno- el “cambio cultural que, respecto a la prevención de los riesgos del trabajo, se produjo en nuestra sociedad desde la creación del sistema (en 1996) hasta hoy”. Y agregó que “estamos pensando una ley que nos permita hacer más eficiente al sistema en sí y nos ayude a reducir la litigiosidad con la que estamos lidiando día a día, que amenaza además el futuro del sistema”.
En esta línea, el funcionario argentino mencionó que se está trabajando en una ley de prevención que apunta, entre otros objetivos importantes, a reconvertir a las Comisiones Médicas (CCMM) de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) en un instrumento “más eficiente, que tenga mayor celeridad en cuanto a la resolución de dictámenes y que esté cerca de la gente”.
Hoy, por ejemplo, muchos trabajadores del conurbano bonaerense tiene que venir a hacer sus reclamos a la Comisión Médica Central, ya que no tienen una en el lugar donde viven”, dijo el superintendente.
Como dato importante, Morón destacó también que hay que “fortalecer” a las CCMM, como parte de la modernización institucional. “Necesitamos que el dictamen de la Comisión Médica tenga carácter de cosa juzgada –garantizando el debido proceso-. Queremos que la instancia de la Comisión Médica sea única, como una manera de reducir la litigiosidad imperante”.
Ambos funcionaros resaltaron, como cierre, que el desafío para los próximos 20 años es “aumentar la prevención, comenzando a inculcarla desde la educación básica y media, es decir, antes de que el ciudadano se convierta en un trabajador”.