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Qué puede aprender la industria de las compañías más disruptivas del mundo

Por Alberto Gabriel, presidente y CEO de Segurarse y Ex presidente de la Cámara Insurtech Argentina.-

Aprender de los mejores es, desde mi punto de vista, la mejor manera de perfeccionarse. Ver qué hicieron las compañías más disruptivas del mundo, y las personas que están detrás de ellas, permite entender la filosofía que esconden algunos de los emprendimientos y proyectos más admirados a nivel mundial.

Como propulsor de la transformación digital de la industria aseguradora argentina, eso fue lo que fui a buscar a Innovation Experience Israel 360, el evento internacional que une a los emprendedores de la región con líderes de Israel, el semillero del mundo en cuanto a lo que disrupción, creatividad e innovación se refiere.

Solo Israel cuenta con más de cien empresas listadas en el Nasdaq, la segunda bolsa de valores electrónica automatizada más grande de EE.UU., superando a toda Europa junta. Su ADN emprendedor se ve plasmado en números, con una proporción de 1 startup cada 400 habitantes.

A su vez, Tel Aviv es el epicentro de más de 1000 startups, siendo así el principal ecosistema emprendedor después de los Estados Unidos. El 60% de la población tiene estudios superiores y el país ocupa el tercer lugar entre los 138 países que componen el ránking de innovación del Foro Económico Mundial. Tiene sentido si se considera que es el país que más invierte de su PBI en investigación y desarrollo.

De todas formas, Israel es mucho más que un hub internacional de innovación global. Es un mindset, una cultura de visión internacional y formas de hacer completamente disruptivas.

¿Qué podemos aprender de Israel?

Como ex presidente de la Cámara Insurtech Argentina y actual presidente y CEO de un bróker digital, lo que me impulsó a formar parte de esta capacitación era ver qué tan lejos estábamos como industria de las empresas que lideran la vanguardia de la innovación y el talento. El momento de tomar acción es ahora. Se espera que el mercado mundial insurtech crezca anualmente a una tasa del 48,8% de 2021 a 2028, hasta alcanzar los 60.980 millones de dólares, según Statista.

Estar allí me permitió ver cómo funciona el ecosistema emprendedor desde la mirada israelí, donde el Estado y el sector privado participan en conjunto, apoyando a las startups en todas sus áreas para que puedan sortear las dificultades iniciales y llevar a cabo su plan de negocio.

Hay una gran sinergia entre estado, universidades, ejército y comunidad global. Y son muy claros en la visión que tienen acerca de la innovación. No tienen miedo a equivocarse. Para ellos, fallar es importante porque, de esos errores, se aprende a construir lo que viene. Entienden que equivocarse es la manera de mejorar.

En su cultura tienen arraigado el afán por resolver problemáticas, y están acostumbrados a resolverlas más allá del tiempo que les pueda llevar. Si bien es un skill que cualquier emprendedor debe tener, y creo que los argentinos lo tenemos, ellos cuentan con más gente dispuesta a eso:  resolver problemas todo el tiempo y con mucha disciplina.

Parte de esta cultura se explica por su formación. Uno de los puntos que más me llamó la atención es que, tanto hombres como mujeres, tienen servicio militar obligatorio. Las mujeres tienen que hacer dos años y los hombres tres. Eso les da una disciplina muy interesante a la hora de encarar proyectos, procesos o de encontrarse con obstáculos en el camino.

No se trata de un servicio militar obligatorio como tenemos pensado conceptualmente en la Argentina; es muy moderno. Durante aquellos años, estudian carreras de ingeniería, tecnología y de distintas ramas teóricas que las combinan de forma híbrida con el propio servicio militar. Por lo tanto, es una formación muy moderna en todo sentido.

Una visión global y sin jerarquías

De todas formas, tras pasar por Innovation 360, no encuentro grandes diferencias entre las empresas y el talento más disruptivo de Israel con este lado del mundo. Las grandes diferencias estriban en que países como Israel gozan de otra seguridad jurídica y de previsibilidad a futuro en términos económicos.

Por otro lado, el apoyo que tienen de financiamiento externo es mucho mayor. De hecho, es el país que más inversiones privadas recibe a nivel mundial. De las 500 empresas globales más importantes (índice Forbes 500), más de la mitad tiene un centro de innovación en Israel.

Sin embargo, a nivel recursos, capacidades y personal, creo que estamos muy cerca de ellos. No percibí que las cuestiones tecnológicas sean inalcanzables desde nuestro lugar. En lo que es tecnología probada, ya puesta en práctica, estamos casi al mismo nivel.  La ventaja la tienen con aquellos conceptos tecnológicos incipientes, que recién están naciendo y tienen grandes inversiones, pero que todavía no son una garantía, corriendo el riesgo de no funcionar o fracasar en el intento de su ejecución. Así como muchas de estas tecnologías se prueban y no corren; otras sí lo hacen.

Cómo CEO de un bróker de seguros digital integral, con presencia en varios países de América Latina, creo que estamos en sintonía con su mirada global. Su mercado interno es muy pequeño, y buscan que sus desarrollos impacten fuera de Israel. Desde Segurarse tenemos ese mindset desde que nacimos.

Paralelamente, en la compañía estamos haciendo muchas de las cosas que vimos. Por ejemplo, en lo que son equipos de trabajo y cómo plantearlos, sin jerarquías, donde todos se puedan decir las cosas abiertamente y que nadie lo tome de forma personal.  Si bien hay un líder, la idea de que pueda surgir la comunicación abiertamente y todo el equipo interactúe como si fueran distintas piezas de un mismo sistema creo que es algo importante.

En Israel veo mucho del trabajo en equipo para poder resolver los principales problemas, lo cual te lleva a innovar: hacer cosas diferentes de una manera diferente y que te pueden llevar al próximo escalón.

Creo que la industria aseguradora argentina puede tomar la posta de la innovación en la industria a nivel regional, pero sólo lo podrán hacer empresas que ya estén invirtiendo en innovación y tecnología, compañías con un mindset diferente como, por ejemplo, muchas de las nuevas que están entrando hoy en la Cámara Insurtech Argentina.

En el caso de las compañías de seguros tradicionales, no estoy viendo innovaciones disruptivas. Lo que hay en esos casos es una fuerte inversión en tecnología para poder aggiornarse y “alcanzar el tren”, ya que están muy atrasadas en todo lo relacionado con lo digital.