Son los sistemas que permitieron a la empresa llegar hasta acá: crecer, diferenciarse de la competencia y garantizar un funcionamiento sin fisuras, una robustez absoluta y todos los datos sobre lo que ocurrió en el negocio en los últimos años. Por todas estas razones las empresas aseguradoras suelen ser reticentes a modernizar sus sistemas legacy.
Pero como ocurre en las industrias que acumulan enormes inversiones en aplicaciones heredadas, aparecen algunas trampas de cara al futuro: falta de agilidad para innovar y responder con rapidez a las nuevas demandas del mercado, el riesgo de que las tecnologías involucradas caigan en la obsolescencia o dejen de tener soporte, un altísimo costo de mantenimiento y, lo fundamental, la incapacidad de integrarse con las herramientas que desde hace ya algunos años dominan el panorama de IT, desde la nube hasta la inteligencia artificial y desde la movilidad hasta internet de las cosas. En el mercado de los seguros, puntualmente, emerge otra complicación: los cambios en las regulaciones, que no siempre el sistema puede reflejar en tiempo y forma.
En simultáneo, el mercado entró en una vorágine competitiva con nuevos jugadores apoyados en tecnologías digitales (insurtech) y los actores tradicionales tratando de capturar las oportunidades que genera este río revuelto. La conclusión es ineludible: al sector asegurador le llegó la hora de la modernización. Un proceso altamente sensible que por un lado busca mover el core del negocio a un sistema nuevo y que no ponga límites al crecimiento ni a las nuevas demandas del mercado y, por el otro, tiene como requisito fundamental proteger los datos históricos, resguardar las mejores prácticas adquiridas y repensar los procesos para identificar mejoras posibles.
El camino a seguir
El concepto de “modernizar” un sistema legacy es amplio y abarca desde actualizaciones o modificaciones sutiles para garantizar su funcionamiento en un nuevo escenario tecnológico hasta una migración total. Concretamente, la consultora Gartner identifica siete modelos de modernización: encapsulamiento (disponibiliza los datos y funciones del sistema heredado como servicio), rehosting (lleva los elementos del sistema heredado de alguna arquitectura antigua como mainframe a una nueva como la nube), reestructuración (se lo migra a una nueva plataforma de ejecución), rediseño (cambios en el backend para mejorar el rendimiento), rearquitecturización (cambios en el código para adaptarlo a una nueva arquitectura), reconstrucción (rediseño para llevarlo a un ambiente nativo en la nube) y reemplazo (descartar el existente e implementar uno nuevo).
La disponibilidad de soluciones completas que resuelven de punta a punta la operatoria de una empresa de seguros hace que esta última se constituya en la alternativa preferente en un número de casos cada vez mayor.
Es lo que ocurre puntualmente con SAP for Insurance: una herramienta que alinea las operaciones centrales con los procesos financieros y las interacciones con los clientes para generar un mejor desempeño, optimización de costos, agilidad para lanzar nuevos productos y servicios y sobre todo una experiencia digital consistente de cara a un consumidor cada vez más informado, volátil y exigente. Al mismo tiempo, sienta las bases para una contabilidad sin fisuras gracias a su integración con SAP Financial Products Subledger (SFPL), cuyo módulo SAP Insurance Analyzer garantiza a su vez el cumplimiento estricto de las normativas vigentes (NIIF).
En un sector en el que la regulación es crítica, el acompañamiento de un socio tecnológico que aporte experiencia y conocimiento de la industria, de los procesos y de la exposición al riesgo durante el proyecto de modernización de sistemas es esencial.
Los sistemas heredados fueron clave en el desarrollo de las empresas aseguradoras, no quedan dudas. Pero abrazarse al pasado en estos tiempos tan vertiginosos es impedir que la empresa comience a competir por todas las oportunidades que está deparando el futuro.