Continuando con la seguidilla de notas donde se abordan las perspectivas de los principales segmentos del mercado asegurador para el ejercicio en curso, en este caso nos dedicamos al ramo Caución, con las opiniones de Aseguradores de Cauciones, ACG, Afianzadora, Fianzas y Crédito, Albacaución, Crédito y Caución, Chubb y Prudencia.
Se trata de un extracto del material contenido en el ANUARIO DE SEGUROS de 100% SEGURO (ver anuario) en donde detalla lo sucedido en el ejercicio 2014-2015 y las proyecciones/tendencias para el ejercicio 2015-2016 de todos los ramos del sector.
En el caso específico de Caución, tuvo un crecimiento del 27,6% anual a junio/15, 13 p.p. por debajo de la suba promedio del mercado, y en línea con la escalada inflacionaria para tal período.
El mercado alcanzó prácticamente los $ 2.000 millones en el ejercicio 2014-2015, reflejando un crecimiento porcentual interanual prácticamente similar al del ejercicio anterior”, detalla Mariano Nimo, Gerente General de Afianzadora Latinoamericana, quien destaca que “en términos de crecimiento real, la prima registró un respetable aumento del 14% con una tendencia a la desaceleración de la inflación y un tipo de cambio aparentemente retrasado”.
En ello coincide Jorge Furlan, Coordinador General de Prudencia Seguros, que atribuye esta situación a la influencia de la contracción de la economía, la situación del comercio exterior, la merma de la obra pública, la inflación general y la devaluación de inicios del año 2015.
Hubo aumento en la morosidad y un alargamiento en el financiamiento del cobro de la prima, al tiempo que las tasas se mantuvieron en niveles sumamente bajos”, completa el ejecutivo de Prudencia.
Desde Fianzas y Crédito, Santiago Seigneur y Agustín Giménez, Directores de Suscripción de la empresa, señalan que “el período abarcado por el ejercicio económico fue bueno en cuanto a crecimiento, siniestralidad y resultado técnico para el sector, aunque el ritmo del negocio fue mermado desde julio a la fecha”.
Otro referente del sector, como lo es José de Vedia, Presidente de Aseguradores de Cauciones, opina que el balance del ejercicio 2014-2015 no es bueno en materia de crecimiento, pero sin embargo observa un panorama más positivo a futuro, en particular a partir de “una mejora en el resultado global, sobre todo debido a que se trató de un ejercicio con menor siniestralidad que el pasado”.
El mercado medido en dólares ha mostrado una baja en torno al 3%, mientras que, si lo medimos nominalmente y en pesos, el resultado es otro. No obstante, es indudable que hemos sufrido un estancamiento económico que tuvo un fuerte impacto en nuestro sector”, complementa Andrés Schoen, Gerente Comercial de Chubb.
A la hora de reforzar las causas de esta situación Diego Brun, Gerente Comercial de Albacaución, aporta: “La obra pública sigue siendo quién impulsa el mercado y ha tomado un rol protagónico en los últimos años. En esta misma situación, el sector aduanero ha perdido preponderancia si lo miramos en retrospectiva, cuando en la década del 2000 llegó a representar un 35 % de la prima del ramo”.
En cuanto al futuro, el ejercicio 2015-2016, para Jorge Furlan “existe un fundado optimismo en que habrá mayores oportunidades a raíz del cambio de gobierno”, aunque considera que se deberán superar algunas de las barreras que han frenado el crecimiento económico y, en particular, observa que CABA y la Provincia de Buenos Aires se presentan como los mercados más interesantes donde seguramente se fortalecerá el segmento de inversiones privadas.
Seigneur y Giménez son “optimistas en que el sector continuará creciendo, aunque la evolución del negocio para el 2016 va a estar fuertemente condicionada por las variables macro que se den en el país”. Para los ejecutivos, “la recuperación de la confianza de los inversores y el incremento de la construcción pública, en particular, en áreas de infraestructura, tales como energía, obras viales, viviendas y salud”, serán aspectos claves a futuro.
Desde Chubb, también confían en que el cambio de gobierno renueve las expectativas y el entusiasmo, quizás sin cambios significativos durante el primer semestre de 2016, pero sí un mediano plazo con un aumento en el flujo de las inversiones que podría traccionar la demanda de garantías.
Martín Moar, Director Comercial de ACG, también tiene una mirada optimista de lo que vendrá.
Nuestras expectativas están centradas en el crecimiento sostenido que experimenta el negocio”, sostiene, al tiempo que observa oportunidades del negocio en actividades ligadas al desarrollo de la infraestructura en general (energía, medios de transporte, sanidad, comunicaciones), que serán parte de la agenda de prioridades de la gestión pública, junto a la recomposición de las economías regionales y su reposicionamiento competitivo dentro del mercado internacional.
Para Gonzalo Córdoba, Director de Crédito y Caución, “con la llegada de la nueva gestión habrá un plan de obra pública muy importante que provocará seguramente un aumento del nivel de las garantías, tanto para obras como para suministros y servicios públicos”. “Si bien seguiremos trabajando los productos tradicionales del ramo caución hemos comenzado una etapa de estudio previo de algunas garantías que podrían surgir a partir del nuevo Código Civil”, comenta.
Un poco más conservador, José de Vedia cree que va a haber un crecimiento “discreto”, dado que 2016 será un año de reacomodamiento de la economía. “Las mejoras se van a comenzar a notar más fuertemente en 2017. Sí va a haber algún repunte en algunos segmentos del mercado, algunas líneas de actividad que van a andar bien y eso va a ayudar a dinamizar el mercado”, precisa.
Para el Gerente General de Afianzadora es clave lograr “una normalización de las variables externas (entre ellas, los holdouts) que permita volver al mercado internacional de crédito y la corrección de algunas cuestiones domésticas”. A su juicio, una recuperación de la Inversión Extranjera Directa, el regreso a los mercados internacionales de crédito, un comercio exterior con menor intervención y una política fiscal-monetaria consistente que controle el efecto inflacionario parecen ser la prioridad de la nueva gestión gubernamental.
Para concluir, Diego Brun considera medular que la actual administración establezca programas de inversión a mediano y largo plazo. “Las nuevas definiciones en materia cambiaria y retenciones, así como las medidas que puedan adoptarse para facilitar la captación de fondos del exterior, serán factores que repercutirán directamente en nuestro mercado”, finaliza.