La quinta encuesta de Coface sobre el comportamiento de pagos en Alemania se ha llevado a cabo en julio y agosto de 2021 y ha contado con la participación de 819 empresas.
Una de las principales conclusiones es que las empresas alemanas parecen haberse aclimatado al entorno pandémico. Ha aumentado el número de empresas que están dando la opción de aplazar los pagos, respecto a 2020 cuando la cifra había caído drásticamente. Aunque Alemania experimentó una fuerte recesión en 2020 y principios de 2021, los plazos medios de pago continuaron mejorando en 2021 en comparación con los buenos resultados en 2020. Además, la duración media de los retrasos en los pagos se redujo en más de una semana.
Las perspectivas comerciales de las empresas encuestadas son muy positivas. Sin embargo, esta evaluación debe ponerse en perspectiva, ya que se produce después de la recesión de 2020. El 41% de los encuestados tiene una perspectiva económica positiva para 2021. Si bien la proporción de respuestas con una perspectiva positiva para 2022 sigue siendo alta, cae al 32% reflejando una situación decreciente. Aunque los efectos del COVID-19 siguen suponiendo un riesgo importante, las empresas perciben las interrupciones de las cadenas de producción como el principal riesgo para sus operaciones de exportación en 2021.
“Los resultados extremadamente buenos con respecto a los retrasos en los pagos son un poco desconcertantes, teniendo en cuenta que Alemania ha experimentado su peor recesión desde 2008. Sin embargo, estos resultados favorables se deben principalmente al apoyo gubernamental. Será interesante ver si las empresas pueden mantenerse una vez que pierden los apoyos financieros «, comentó Christiane von Berg, economista para Europa del Norte de Coface.
Las empresas alemanas se han acostumbrado a la pandemia
- Según la encuesta, las empresas alemanas se han relajado en 2021 y han proporcionado más facilidades de pago a sus clientes. En 2020, las empresas fueron muy cautelosas: la proporción de empresas que ofrecían créditos de pago se redujo de más del 80% en el período precovid, al 62%. Esta tendencia se ha revertido en 2021, ya que el 74% de las empresas las ofrecen actualmente. Las empresas alemanas que operan en el mercado nacional son el principal impulsor de este cambio: mientras que solo el 57% ofrecieron facilidades de pago en 2020, este porcentaje aumentó al 73% en 2021.
- Los plazos de pago cortos (entre 0 y 60 días) siguen dominando el panorama empresarial alemán. El 88% de las empresas solicitaron que los pagos se realicen en un máximo de 60 días en 2021, lo que prácticamente no ha cambiado con respecto a 2020 y 2019. La distribución de los rangos de tiempo para las condiciones de pago tampoco ha variado, lo que explica que el plazo de pago promedio en 2021 disminuyera solo marginalmente de 33,5 días en 2020 a 32,6 días en 2021.
- En cuanto a los sectores, la construcción todavía tiene los plazos de pago más cortos: casi el 75% de los participantes espera que sus facturas se paguen dentro de los primeros 30 días con un promedio de 24,4 días. En 2021, 7 de los 11 sectores ofrecían plazos de pago superiores a 90 días, mientras que los plazos de pago ultralargos (superiores a 120 días) se han vuelto muy inusuales.
- Se han observado fuertes incrementos en los plazos pago – con una media de casi 10 días – en los sectores de la construcción y textil-confección. Por el contrario, maquinaria (-8,2 días), agroalimentario-madera (-7,3 días) y automoción (-6,3 días) registraron las mayores caídas en dichos plazos. El textil – confección se convirtió en el sector más permisivo y ahora acepta que los pagos se liquiden en promedio hasta 47 días después de la entrega.
Las respuestas de la encuesta insinúan que la incertidumbre en torno a la crisis del COVID-19 ha disminuido en 2021, pero que las empresas permanecen atentas. Más empresas están ofreciendo plazos de pago en Alemania, pero se han acortado ligeramente, lo que sugiere que las empresas quieren cobrar lo antes posible.
Retrasos en los pagos: las empresas cobran más rápido
- Desde 2020, los retrasos en los pagos disminuyeron aún más. En 2021, solo el 59% de las empresas encuestadas reportaron retrasos en los pagos, mientras que en 2020 fueron el 68%. Con la excepción del transporte y los metales, los retrasos en los pagos disminuyeron en todos los sectores. Sin embargo, mientras que menos de la mitad de las empresas de los sectores agroalimentario y maderero notificaron retrasos en los pagos, la cifra fue del 70% en el sector textil-confección.
- En el sector de Tecnología de la Información y las Comunicaciones (TIC) la gran mayoría de las empresas encuestadas informaron de retrasos no superiores a 30 días y ninguna empresa indicó retrasos superiores a 60 días. En contraste, el metalúrgico fue el único sector que reportó retrasos de más de 150 días (2%). Lo que supone una mejora significativa. En 2020, además del sector de los metales, las empresas de construcción y papel/embalaje también informaron retrasos en los pagos ultralargos.
- La duración media de las demoras en los pagos disminuyó en consecuencia en 8 días llegando a 27,7 días en 2021, que es la demora más corta desde que se tienen registros. Casi todos los sectores informaron de una disminución en la duración de los retrasos en los pagos. Los descensos más fuertes se produjeron en los productos farmacéuticos (-26 días) y las TIC (-25 días). Las empresas que operan en TIC tienen ahora el tiempo de espera más corto con una media de 17,5 días, mientras que las empresas del sector de maquinaria cuentan con un tiempo de espera medio de 35,8 días.
- Los motivos de los retrasos en los pagos están relacionados principalmente con dificultades financieras (46% en 2021). El 20% de los encuestados citaron una menor demanda en Alemania, principalmente debido a los confinamientos. Curiosamente, otro 20% mencionó la falta de opciones de financiación, a pesar de que los programas públicos para hacer frente al COVID-19 aún están vigentes.
- Los riesgos financieros asociados con los retrasos en los pagos para las empresas alemanas son menores en 2021. Solo el 4,4% de los participantes informaron que la proporción de pagos atrasados entre 6 meses y 2 años representa el 2% o más de su facturación anual.
Las empresas se apoyarán en las ayudas estatales
- La evaluación de las empresas sobre las perspectivas económicas es cautelosa, pero optimista. El 41% de los participantes tiene una perspectiva económica positiva para 2021, mientras que el 11% piensa que su situación se deteriorará con respecto a 2020. En general, las respuestas marcan un fuerte cambio de rumbo respecto a un mal 2020. Se observa optimismo en todos los sectores, con el mayor repunte en el sector de la metalurgia y de la automoción. Las perspectivas para 2022 también son positivas, pero parecen menos seguras. El sector textil-confección es el más optimista para 2022. Sin embargo, esta fuerte mejora en el sentimiento debe ser puesta en perspectiva con la muy difícil situación en 2020 y 2021 para este sector en particular. Lo mismo ocurre con el sector del automóvil, donde las perspectivas positivas están repuntando después de caer en el estancamiento en 2020.
- Según la encuesta, el principal riesgo para la exportación en 2021 son las interrupciones de las cadenas de producción globales, citadas por el 40% de los participantes. El aumento de los precios de las materias primas distintas del petróleo también es un tema importante en 2021 (20%), seguido de los efectos del COVID-19 en la economía mundial (10%) y en la economía alemana (8%).
- Alemania sigue siendo el país que presenta las mayores oportunidades para las empresas encuestadas. Sin embargo, su importancia ha disminuido del 91% en 2020 al 85% en 2021. Una razón podría ser que, en tiempos de incertidumbre, las empresas tienden a hacer negocios en los países que mejor conocen y se orientan más hacia su mercado interno (el llamado efecto refugio). Ahora que las incertidumbres han disminuido, las empresas vuelven a hacer más negocios en el extranjero.
- Los tiempos difíciles exigen medidas especiales. Cuando se les preguntó por el uso de las ayudas estatales en el último año, la proporción de empresas que respondieron positivamente en 2021 se mantuvo en un 48%. El desglose de las medidas de apoyo también se mantuvo, y la medida más popular siguió siendo el régimen de licencias.
De acuerdo con la ley actual, las ayudas de emergencia del gobierno federal y las medidas de desgravación fiscal expiran a fines de septiembre de 2021, mientras que los programas especiales de licencias, las garantías estatales y los programas especiales de préstamos expirarán a finales de 2021. Será interesante ver si el comportamiento de pago muy positivo y las perspectivas comerciales optimistas pueden continuar en 2022 sin el apoyo del Estado.