El mes de enero presenta importantes bajas respecto a la remuneración de los plazo fijos mayoristas. Esto se debe a la reducción de las tasas de referencia, donde parte de la mayor demanda proviene de las inversiones institucionales de las compañías de seguros que al verse restringidas en la compra de Lebacs se vuelcan a otras opciones.
A raíz del cambio de la política monetaria del Banco Central (BCRA), las tasas para depósitos a plazo fijo dejaron de subir en los primeros 10 días de 2018. Las remuneraciones promedio habían tocado un piso en abril y venían subiendo desde mayo para todos los segmentos. Sin embargo, en enero se vieron bajas en los depósitos mayoristas. Los minoristas, en cambio, mostraron una tenue mejora.
El 2017 se consagró como el año de los préstamos, y los bancos – para capturar fondos- fueron subiendo lentamente las tasas con las que remuneraban a sus ahorristas. El punto más bajo se había dado en abril del año pasado y desde ese momento las tasas comenzaron a aumentar. La tasa pasiva general promedio pasó de 17,8% a fines de abril a 21,7% al término de diciembre. En el caso de los plazos fijos hasta $ 100.000, la remuneración promedio pasó de 16,5% a 20,8% entre el quinto y el doceavo mes del año, señala El Cronista.
Según lo publicado por el BCRA, si se toma el promedio de los primeros 10 días de enero y se lo compara con igual registro de los meses anteriores, se ven recortes en las tasas para los grandes depósitos. La TM20, es decir, la tasa de interés por depósitos a plazo fijo de 20 o más millones de pesos o dólares, pasó de promediar 24,4% en los primeros 10 días de diciembre a anotar 23,6% en enero. Por su parte, la tasa Badlar de los bancos privados (el promedio de lo que pagan las entidades por depósitos de más de $ 1 millón a 30 o 35 días) pasó de promediar 23,2% en los primeros 10 días de diciembre a 23% en igual período de enero.
Según El Cronista, al momento de justificar por qué las tasas que más sufrieron fueron los de depósitos más grandes, los bancos dieron dos explicaciones. Por un lado, señalaron el efecto del recorte de la tasa de referencia en los plazos más largos. Por otro lado, voceros bancarios indicaron que hay una mayor demanda de plazos fijos en la banca corporativa, fundamentalmente traccionada por las compañías de seguros que al no poder invertir en Lebac buscan otras alternativas.
Para los minoristas, la situación es diferente. Tanto Banco Provincia como otras entidades confirmaron que no realizaron cambios en sus tasas pasivas luego del ajuste monetario. Esto se debe a que los préstamos todavía crecen por encima de los depósitos y las entidades están muy agresivas en la captación de fondos. Los números también lo muestran: en los depósitos minoristas de hasta $ 100.000 la remuneración promedio pasó de 20,4% a 20,8% entre los 10 primeros días de diciembre e igual período de enero, concluye El Cronista.