Desde el último lunes 21/1 por la tarde, no hay noticias del paradero del jugador argentino Emiliano Sala, ni del piloto que lo trasladaba en la avioneta Piper Malibu desde Nantes, Francia – atravesando el Canal de la Mancha- hasta Cardiff, Gales.
Recordemos que horas antes, Sala había firmado un contrato por 17 millones de euros para jugar en el Cardiff City, dejando atrás el FC Nantes, tras una excelente temporada en la liga francesa.
A medida que pasaron las horas, siguen sin aparecer mayores pistas para entender lo qué pasó. Tan sólo un audio que le envió Sala a un grupo de amigos por Whatsapp desde la avioneta, advirtiéndoles que tenía miedo, que si no sabían más nada de él, «ya sabían qué había pasado».
Muchas son las hipótesis que se están manejando en las últimas horas. La policía de Guernsey- una isla en el Canal de la Mancha- publicó cuatro posibles escenario sobre el vuelo, pero lo cierto es que este jueves 24/1 decidió suspender la búsqueda del jugador y el piloto dado que las posibilidades de encontrarlos son «extremadamente remotas».
«Revisamos toda la información que tenemos disponible y hemos tomado la difícil decisión de finalizar la búsqueda», señalaron.
Cerrada esa etapa, con un final previsible pero sobre el cual aún muchos tenían esperanzas de encontrarlos, varios especialistas analizaron los aspectos contractuales y los relacionados con el seguro del jugador, en el marco de un traspaso multimillonario.
En cuanto al seguro, para Thierry Granturco, abogado francés especializado en derecho deportivo, en caso de muerte, los ascendientes y descendientes del jugador deberían recibir una indemnización de acuerdo con su salario. Se beneficiarían de un seguro privado contratado por el club para hacer frente a las lesiones, pero también a la muerte.
Si sucede que se trata de un accidente aéreo, es sobre todo al asegurador del fabricante de la aeronave el que hay que apuntar», dijo Granturco.
Para el abogado, y según lo publicado por Infobae, el asegurador del club debería recurrir primero al seguro del transportista invocando su responsabilidad para compensar a las víctimas.
Recordemos que en primera instancia se divulgó que el Cardiff Club le había ofrecido una avioneta a Sala para que se traslade hasta Francia y despida a sus compañeros del Nantes. Pero el presidente del club aseguró que fue Sala quien reservó el avión Piper para hacer el viaje y que no fue el club el que lo organizó.
En cuanto a los aspectos contractuales, la clave parece estar en la transferencia del jugador de un club al otro.
Para que un contrato se considere válido, la transferencia debe constar en el sistema informático de la FIFA», explicó a Le Point Thierry Granturco.
«Si bien Cardiff y Sala acordaron los elementos esenciales del contrato (duración, remuneración), la ley del deporte exige la firma y la aprobación del contrato en la base de datos de la FIFA. Solo después de este proceso se da una fecha a la transferencia de un club a otro», agregó el abogado.
A su vez, Le Point consultó a otro especialista qué sucede con el pago de la transferencia, en un contrato como el de Sala y Cardiff que ya está vigente.
Depende de si el acuerdo de transferencia está sujeto a condiciones especiales», dice el especialista Philippe Veber. Si no lo hay, explica que «este es un evento completamente independiente del campo del contrato, por lo que Cardiff debería pagar», agrega Veber.
Habrá que esperar cómo se suceden los hechos en las próximas horas. Aún hay muy poca información sobre aspectos operativos del viaje que terminarán siendo centrales a la hora de consignar responsabilidades. Lo mismo en cuanto al contrato y las coberturas de seguros involucradas. Una triste noticia, con final incierto.
Fuente fotografía: Cardiff City