Buena parte de Argentina ya salió de vacaciones y ahora quienes pueden tomarse unos días, para algún lado, se van. Pero, después de la selfie en el arranque glorioso, los chicos preguntan “cuánto falta”, el mate no tiene más agua, y comienzan las ganas de llegar.
Justo en ese momento, el motor levanta temperatura y se apaga; o se pincha la rueda y después de vaciar el baúl nos dimos cuenta que no está la llave cruz y que no hay un arbolito de sombra.
Entonces, en el celular salvador, está el teléfono de cualquier asistencia; adonde un operador cualquiera informa que la demora promedio de cualquier auxilio, es de seis horas, – “pero estoy tirado en la ruta” – “seis horas” -“pero estoy con niños y mascotas” – “seis horas, lo va a querer o no”, y con resignación, la familia espera.
Iké le cambia el final a esta historia.
“Este verano como todos, continuamos con nuestro compromiso es asistir en el tiempo máximo de 90 minutos. Nuestra campaña “Iké llega a tiempo”, es nuestra promesa de valor y nuestros indicadores acompañaron; el promedio de asistencia vial de Iké llegó fue de 70 minutos, aún por debajo del compromiso”, afirma Jorge D’Urbano, Director Ejecutivo de Iké Argentina.
“Durante la temporada, también nos aseguramos de estar presentes con nuestros usuarios proveyéndoles hidratación en el momento del arribo y desde nuestro Centro de Servicios, compartimos en todo momento con el cliente, la evolución de su asistencia.”
Para D’urbano, “así es como vivimos, buscamos ayudar y mejorar el momento que le toca vivir a nuestros clientes. Nos gusta atender con calidez, abordamos cada emergencia con compromiso y acompañamos siempre, porque todas las situaciones son importantes.”
D’Urbano comenta que en Iké, cumplir con el menor tiempo posible de respuesta, implica una filosofía de negocios.
“Estamos certificados con normas ISO, pero vamos más allá. Nosotros no ahorramos costos y no cambiamos las reglas sobre la marcha. Buscamos cómo cumplir el servicio en el momento y dar un plus. Nuestros clientes nos han enviado videos testimoniales que nos han permitido verificar la satisfacción del servicio y los hemos incorporado en el spot publicitario para dar pruebas fehacientes de nuestro nivel de servicio.
Todo el año “Iké llega a tiempo”, sin embargo este verano, con un considerable aumento de turismo interno, la compañía respondió con puntualidad a los miles de pedidos de asistencias, que representaron un 25% más que los servicios habituales.