En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, las marcas de lujo se enfrentan a un desafío único: cómo abrazar la innovación digital sin comprometer la esencia de la exclusividad y la herencia que las caracteriza.
Según el informe «Tendencias digitales moda & lujo» realizado en enero de 2024 por T2Ó Industry, el presente año se proyecta como un escenario de consolidación para recursos como la Inteligencia Artificial Generativa, la Realidad Virtual, el Blockchain y la Big Data.
Se trata de una transición inevitable en el comercio retail de lujo, pues la tendencia ha sido buscar la personalización total del servicio. La consultora McKinsey, por ejemplo, proyecta para 2025 que casi el 20% de las ventas en este sector del producto de lujo se hará vía online, y en lugares como Europa y Estados Unidos, el comercio de lujo retail podría alcanzar los 300 mil millones de dólares en 2024 (Orienteed).
Blockchain, puente entre la exclusividad y la digitalización
Las marcas de lujo están navegando por el panorama digital y adoptando un enfoque estratégico integrando tecnologías como el blockchain, que según Ramón Solé, director del MBA Luxiry de EAE Business School, perteneciente a Planeta Formación y Universidades, están al servicio de la trazabilidad, la seguridad y el control, como recurso complementario.
«Las marcas de producto de lujo también están usando redes de comunicación entre cluster de clientes asimilables, potenciando el sentimiento de pertenencia. Eso, junto al uso de creatividad adaptado al cliente totalmente personalizado usando inteligencia artificial, genera tasas de fidelidad muy altas», detalla el experto.
Influencers, la otra estrategia que sigue siendo clave en el mercado
Las marcas de lujo están adoptando una estrategia más profunda al colaborar con estos líderes de opinión, fortaleciendo el mensaje de exclusividad en un mundo digitalmente democrático.
«Mayor colaboración es la clave», indica Ramón Solé. «Las marcas están implicando más a los influencers en los ejes de comunicación, haciéndoles realmente partícipes desde el interior de la marca, pero sin perder la frescura de sus aportaciones».
La mezcla ideal, entonces, parece estar en la implementación tecnológica —como la IA y la realidad virtual—, balanceada con el factor humano, que de alguna manera sigue siendo fundamental para la decisión de compra de las audiencias. Está en la creatividad de las marcas encontrar la dosis exacta de ambas.
«Las oportunidades son la fuente de creatividad y la adaptabilidad. El desafío es no perder la identidad de la marca», concluye el vocero de EAE Business School. «El toque humano no puede ni debe perderse… es insustituible. La tecnología debe estar a su servicio para optimizar la relación personal».
En un mundo cada vez más digitalizado, las marcas de lujo están demostrando su capacidad para adaptarse sin comprometer su esencia. Al integrar la innovación con cuidado y estrategia, estas marcas continúan definiendo el estándar de excelencia en el mundo del lujo.