Contratar al talento adecuado es el primer paso para construir un equipo de alto rendimiento. Sin embargo, las empresas necesitan estrategias para empoderar y retener a su fuerza laboral. En una época en la que las empresas compiten por los mejores talentos, los líderes se enfrentan al desafío de atraer y retener.
Los sueldos y beneficios son factores que están en el primer lugar en el orden de prioridades de las personas a la hora de buscar empleo y que suelen ser decisivos para elegir donde trabajar. Pero las empresas también deben tener en cuenta que ofrecer oportunidades de crecimiento profesional, acceso a programas de capacitación y desarrollo y el equilibrio entre el trabajo y la vida suman un valor diferencial importante.
“Las empresas primero deben comprender las necesidades de los empleados para luego poder atenderlas. Los líderes deben adaptar las necesidades de la empresa con las habilidades del talento para lograr así mejorar la experiencia de los empleados y conseguir el compromiso y la retención a largo plazo”, comenta María Laura Palacios, CEO de G&L Group
Considerando esta situación, la ejecutiva junto con el equipo de Recursos Humanos de la compañía, desarrollaron un Decálogo de Valores para mitigar la fuga de talentos, dirigido a lograr que los colaboradores elijan trabajar en la empresa todos los días.
- Crecimiento- Asegurarles a los talentos que tienen una misión y que sepan lo que se espera de ellos. Marcarles el camino y acompañarlos para ayudarlos a alcanzar los objetivos y evitarles la desviación del esfuerzo y tiempos.
- Innovación – Animar e invitar a los colaboradores a compartir ideas y proponer innovaciones. Evitar la monotonía y fomentar la autonomía. Que sientan que no se estancan.
- Formación – Invertir en la carrera, el desarrollo de las habilidades y la profesión del talento para transmitirles seguridad de un futuro rentable a largo plazo. Capacitar, formar, brindar herramientas y procesos que les permita aplicar todo su conocimiento.
- Inclusión – Fomentar una cultura de diversidad e inclusión. Todos los empleados deben recibir el mismo trato más allá del género, origen, idioma, lo que mejore vínculos, cooperación y una mayor satisfacción dentro de los equipos.
- Acompañamiento – Pertenecer a una compañía de puertas abiertas, contener y acompañar a las personas. El mejor trabajo es ese que se hace en equipo.
- Propósito – Fomentar no solo el acompañamiento, sino también el reconocimiento al trabajo de las personas. Lo que hacen, es importante para nosotros, valoramos siempre el agregado.
- Movimiento – Generar esquemas de promoción interna para acompañar el desarrollo profesional de las personas y sumar skills a su curriculum.
- Flexibilidad geográfica- Poder incorporarte a una compañía independientemente del lugar en donde residas. Generar posibilidades de empleo a través de la contratación de trabajo en forma remota.
- Beneficios – Mantener un esquema de beneficios que no solo atiendan a lo económico, sino que acompañen las necesidades de bienestar de las personas.
- Ambiente –Creemos que es fundamental hacer de nuestra organización un excelente lugar para trabajar. Estamos convencidos que el clima laboral es clave para ser una compañía en la que las personas elijan trabajar.
“Los talentos que se destacan son los que siempre quieren aprender y crecer. La falta de oportunidades o de tareas que supongan un desafío, la falta de un plan de carrera o no trabajar con otras personas que pueden sumar, son condiciones que afectan al interés de la persona por seguir trabajando en la empresa”, enfatiza la ejecutiva.
La competencia por el talento tecnológico hoy es una realidad y las empresas se esfuerzan por encontrar a profesionales especializados. Poder retenerlos hoy es posible; es importante saber mirar más allá y aprovechar sus habilidades, brindarles espacios y oportunidades para que puedan desarrollarse y crecer; y sobre todo empoderarlos, demostrándoles que su valor agregado es clave para la empresa.