Un reciente informe de la consultora McKinsey & Company, al que tuvo acceso 100% SEGURO, resalta la importancia de optimizar el retorno sobre el talento (RoT) mediante una serie de acciones y métricas clave que pueden transformar la forma en que las organizaciones gestionan a sus empleados.
«Un sistema de talento eficaz no solo mejora la productividad, sino que también enriquece la experiencia del empleado, creando un entorno donde el talento puede florecer y contribuir al éxito organizacional a largo plazo», explican.
El informe pone el ojo en cinco aspectos:
- Desarrollar una planificación estratégica basada en habilidades (skills): la planificación estratégica del talento implica identificar las habilidades críticas necesarias para alcanzar los objetivos de la empresa. Esto requiere una comprensión profunda de las competencias actuales del equipo y una previsión de las necesidades futuras. Las organizaciones deben mapear las habilidades disponibles y crear planes de desarrollo que cierren las brechas existentes. La clave está en ser proactivo y adaptarse rápidamente a los cambios del mercado y las demandas tecnológicas.
- Contar con un motor de contratación eficaz: el proceso de contratación debe ser ágil y competitivo. Un motor de contratación eficaz se centra en atraer y seleccionar a los mejores talentos de manera rápida y eficiente. Esto incluye el uso de tecnología avanzada para filtrar candidatos y una experiencia de candidato positiva que refuerce la marca del empleador. La velocidad y la calidad en la contratación son esenciales para mantenerse por delante de la competencia.
- Invertir en aprendizaje y desarrollo: la inversión en programas de aprendizaje y desarrollo continuo es fundamental. Las organizaciones deben ofrecer oportunidades de capacitación personalizadas que se alineen con los objetivos de carrera de los empleados y las necesidades estratégicas de la empresa. El desarrollo de habilidades debe ser visto como una inversión en el futuro de la organización, fomentando una cultura de aprendizaje constante.
- Avanzar en una cultura de alto rendimiento: crear una cultura de alto rendimiento implica establecer mecanismos claros de responsabilidad y mejorar la experiencia del empleado. Esto se puede lograr a través de la implementación de sistemas de retroalimentación continua, reconocimiento y recompensas. Una cultura de alto rendimiento motiva a los empleados a dar lo mejor de sí mismos y contribuye a un ambiente de trabajo positivo y productivo.
- Transformar el modelo operativo de RRHH: la transformación del modelo operativo de recursos humanos es crucial para convertir a RRHH en un socio estratégico de la organización. Esto implica adoptar un enfoque ágil y centrado en la creación de valor. Los equipos de RRHH deben estar equipados con las herramientas y tecnologías necesarias para apoyar de manera efectiva a los empleados y alinearse con los objetivos de negocio.
Para la consultora, implementar estas acciones de manera conjunta puede ayudar a las organizaciones a maximizar su retorno sobre el talento, logrando un sistema integrado y menos fragmentado que genera mayores beneficios a largo plazo.