En el marco del 20° aniversario del Sistema de Riesgos del Trabajo, la Superintendencia de Riesgos del Trabajo realizó un evento especial con invitados locales e internacionales el pasado 5 de julio en el Hotel Hilton de Buenos Aires.
Bajo este contexto, 100% SEGURO estuvo cubriendo la totalidad del evento (ver programa) y aprovechamos para entrevistar a Daniel Funes de Rioja, Vicepresidente 1º de la Unión Industrial Argentina (UIA), quien trazó un balance de las 2 décadas del Sistema y también, el rol clave que ha tenido la justicia con los fallos, entre otros temas.
100% SEGURO: ¿Cuál es el balance que hacen en este aniversario, desde la puesta en marcha del Sistema hasta la actualidad?
Daniel Funes de Rioja (DFR): El primer punto que uno debe destacar es que nosotros salimos del histórico régimen de accidentes del trabajo de la Ley 9688 de 1915, y pasamos a un régimen de seguro integral, que ya era imperante en el mundo cuando ya discutimos el tema en 1994.
Segundo punto, el balance no puede dejar de ser positivo desde el punto de vista de la baja siniestralidad mortal. Esto creo que es un crédito que tiene la sociedad en su conjunto. Con esto no quiero decir que esté satisfecho por lo que se ha hecho en materia de prevención. Hay mucho más por hacer, sobre todo en el dominio de la micro y pequeña empresa.
La Argentina tiene índices de informalidad del 40%, es decir, hay un universo que ni está asegurado ni seguramente hace prevención. Ahora bien, a partir de ahí tenemos que señalar que cuando se crea el Sistema (cuando se firma el acuerdo de 1994, firmado entre la CGT, el Gobierno y los empresarios) es evidente que arrancamos sin bases de datos, sin registro de siniestralidad con un país que salía de una hiperinflación, con lo cual era hasta difícil hacer una base casera de datos estadísticos. Hubo que recurrir a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para que nos dijeran cómo era la experiencia del mundo. A partir de ahí, se ha ido construyendo una experiencia importante del registro de siniestralidad de sectores de mayor riesgo y del tipo de medidas que tenían que tomarse.
Paralelamente a esto, nació o rebrotó una tendencia a la litigiosidad muy fuerte. Hay una parte que tiene justificación, desde el punto de vista técnico, porque el Sistema tuvo que nacer con adecuaciones sucesivas o progresivas y se fueron corrigiendo esas fallas. Se fueron buscando mecanismos que cubrieran la inflación, como la instauración del RIPTE de la última reforma de la Ley 26.773. Sin embargo, vemos que se mantiene una situación paradójica: bajan los siniestros, aumentan los juicios y lo que es importante, aumentan las condenas sin tener que ver con el régimen de la Ley. Como por ejemplo, en un accidente in itinere la ley dice concretamente qué hay que pagar y qué no hay que pagar, como es el caso del daño moral, que lo excluye porque no hay responsabilidad subjetiva, es algo que le pasó en la calle. Sin embargo aparecen Tribunales apartándose concretamente de la Ley y condenando por daños morales.
Segundo ejemplo de los muchos que uno puede dar, es el índice de actualización del RIPTE, una actualización importante donde se discutió y analizó mucho con el Gobierno y la CGT. Ahora lo que sucede es que se aplica una tasa por sobre ese RIPTE, por lo que los jueces están indexando sobre lo indexado.
Obviamente todo eso lleva a que haya Tribunales que se ponen de moda y que tengan más demandas en una jurisdicción que en otra, de acuerdo a esas tendencias, por lo que lo patológico se convierte en la regla. Ahora, si esa patología se instala no hay Sistema que sea previsible, ni que sea sustentable y no hay seguro que sea viable.
Si hay un Sistema mejor que éste en algún país del mundo, tráiganlo y lo discutimos, pero no es así. Esto lo sabemos porque el tema lo estamos siguiendo en el mundo.
100% SEGURO: ¿Crees que esta propuesta de cambiar el fuero puede mejorar todo lo que hace al rol de la Justicia y a la vez mejore de las comisiones médicas?
DFR: Yo creo que hay cuestiones que son centrales pero en definitiva lo primero que tenemos que hacer es tenerle respeto a la Ley. Si no hay seguro, no hay previsibilidad; si no hay previsibilidad no hay asegurabilidad; y si no hay asegurabilidad hay empresarios que se van a fugar y se van a filtrar del Sistema. Por lo cual, aumentamos el universo de por sí alto de los informales. Creemos en un mundo de formalidad, de prevención y contención del accidentado. Creemos en un mundo de reparación justa pero justa no es “ilimitada”, porque no hay seguro que lo sea.
Me parece que todo esto tiene que tener una racionalidad que, evidentemente, tiene que permear en la sociedad. Tenemos que saber transmitirla, es muy importante el rol de los comunicadores porque esto lo venimos discutiendo a nivel internacional, no solo en la OIT sino también en el G20, que el 11 y 12 de julio va a realizarse un encuentro en Pekín (China), donde se van a discutir las implicancias de la catástrofe con talleres clandestinos en edificios no habilitados que involucró, lamentablemente, a millares de personas siniestradas. Ello implica replanteamos dónde debe estar el énfasis de los trabajadores y empresarios en el tema de cultura de prevención, que es básico.
100% SEGURO: En España existe una Ley de Prevención, ¿crees que en Argentina es viable y necesaria?
DFR: Creo que sí, lo que tiene que atender es a las realidades sectoriales, no es todo igual y depende por ejemplo de la dimensión de cada empresa. La realidad de una empresa mediana y grande no es la realidad de un taller industrial y en determinados tipos de actividades la situación cambia sensiblemente. Hay que trabajar con realismo sobre eso, sin poner estándares ilusorios sino cumplibles.
100% SEGURO: Incluso en un contexto como el nuestro, donde la informalidad del 40% es muy alta comparado con países desarrollados que es con quienes debemos compararnos.
DFR: Rescato profundamente esa frase. Argentina tiene vocación y todos nosotros tenemos vocación de país desarrollado. Ejemplos de subdesarrollo tenemos muchos. El régimen de riesgo del trabajo está tomado de los países desarrollados y es efectivo en estos países.
Allí pagan alícuotas que van del 0,3 al 1,5%; nosotros estamos pagando entre el 10% y 20%. Además de la cobertura, está en discusión el Sistema, entonces…algo anda mal. Y esto, probablemente sea un tema de comunicación, perfeccionamiento de determinadas instituciones que están en proceso de dialogo. Por eso, tiene que ser consensuado entre trabajadores y empresarios, Gobierno y actores políticos. También, hay que tomar conciencia del Poder Judicial, el cual puede tener ideales que están más cerca de la poesía que de la matemática, pero hay realidades concretas y estas tienen que ser contenidas.