Columnistas

Apuntes de PASA

Por Andrés Sironi, Enviado Especial 100% SEGURO.-

Luego de 12 años, Argentina volvió a ser anfitrión y sede de uno de los eventos de mayor preeminencia en seguros de fianzas y crédito. El Hotel Llao LLao de San Carlos de Bariloche fue sede de la XXXI Asamblea Anual de la Asociación Panamericana de Fianzas.

La actualidad del sector a nivel global, la relevancia del mercado argentino y el sitio elegido por los organizadores, confluyeron para que el evento sea récord en cantidad de participantes.

Destacados profesionales del sector asegurador y reasegurador del mundo se dieron cita para intercambiar y enriquecer a la profesión en la materia.


En esta ocasión se optó por un evento con dinámica diferente  y más abarcativa, pues el mismo se dividió entre una agenda matinal de disertantes de otras áreas de conocimiento pero que con sus conceptos contribuyeron a dotar de herramientas alternativas, propuestas innovadoras y análisis en materia política y económica de la región; todo ello para una mejor toma de decisiones de los asistentes en sus funciones. Durante el resto del día se suscitaron las profusas e intensas reuniones bilaterales de los profesionales de cada compañía.

La apertura de las exposiciones estuvo a cargo del Superintendente de Seguros de la Nación, Dr. Juan Pazo, quien en una clara exposición  detalló los aspectos salientes en su gestión en materia de transparencia y modernización en pos a todo el sector asegurador. Su ponencia finalizó con un análisis de temas puntuales en materia de seguros de caución.

Sobre esta última parte se enfocó en el interés por promover coberturas específicas como el seguro de caución en garantía de alquileres, una problemática siempre necesaria y actual de la sociedad y que requiere del aporte de soluciones del sector. Luego destacó la aprobación de las fianzas requeridas por el código civil en materia de prehorizontalidad y fianzas incondicionales en los contratos privados. Y finalmente incursionó en el tema más sensible y candente referido a las cláusulas de incondicionalidad o primer requerimiento en los seguros de caución de contratos públicos, en orden a las exigencias de los organismos multilaterales de crédito al Estado y las condiciones de los financistas de los adjudicatarios en los contratos de Participación Público- Privada (PPP). Fue una abierta invitación a participar y apoyar las políticas de su gestión. Vale decir que fue el único disertante que abordó cuestiones técnicas, pero dejó elementos suficientes para charlas y debates que se suscitaron a lo largo de todo el evento.

El clima otoñal de Bariloche y el entorno del Hotel LLao Llao favorecieron el clima de las reuniones bilaterales entre los asistentes, en donde mayormente se suele compartir información sobre la marcha de los negocios, intercambio de experiencias entre los diferentes mercados y se sostienen tratativas en materia de programas de reaseguros.

Sobre el mercado argentino de Fianzas

Entre los asistentes predominó la preocupación y cautela sobre la marcha de este segmento de riesgo, ya que el sector hoy no muestra los indicadores que históricamente lo destacaban sobre otras ramas locales. El incremento de la siniestralidad y también la morosidad creciente de cartera de clientes conforman un fuerte llamado de atención.  Asimismo, se observa un volumen decreciente de negocios, y un número de operadores que se han venido incrementando en el tiempo gracias a las facilidades normativas y en especial a la enorme oferta de capacidad del mercado reasegurador.

A esta situación se le suma la coyuntura actual, con una economía complicada y un año político muy particular por las elecciones presidenciales. Todas las variables confluyen en un escenario de considerable cautela y expectativa.

En este panorama, el convite inicial del Dr. Pazo a trabajar en la incondicionalidad de las fianzas en contratos públicos, fue tomado con distancia y prudencia. Es un tema de un análisis profundo para cualquier mercado cuando ello significa insertar un elemento que cambia sustancialmente la forma de hacer este negocio.

Pero vale decir que el Estado, como actor de mayor demanda de este tipo de garantías, transmite a través de su Órgano de Control un planteo específico, lo cual ratifica que el seguro de caución es una herramienta válida y útil como solución a sus necesidades.  El correlato lógico por parte del sector asegurador, es proponer que se establezca un ámbito de trabajo y consenso para la búsqueda de una solución alternativa posible; más aún ante la coyuntura e implicancias que dicha modificación normativa conlleva. No es recomendable apresurarse. Hay antecedentes válidos que vale recordar, en donde ante otros problemas de complejidad similar se trabajó en este sentido en garantías aduaneras e impositivas, garantías para turismo estudiantil, etc.  Seguramente sea un debate muy concurrido y con enriquecedoras posiciones en orden a la relevancia del tema y cantidad de actores en el mercado.

En síntesis, fue un evento muy positivo para el sector a nivel global, de nutrida participación de operadores a nivel mundial, en un formato novedoso, y más amplio y variado en la propuesta de contenidos. Hubo coincidencias en las preocupaciones regionales subyacentes que afectan el devenir de los negocios, cuestiones generales como la coyuntura política y económica de la región, la incidencia de la corrupción y evasión (“Panamá Papers”) y cuestiones específicas de la rama como innovación, volumen de negocios, y diversificación de productos que contrarresten la puja comercial en desmedro del resultado técnico.

Como sede y organizadores, Argentina fue un poco el resumen como mercado de estas inquietudes y fue un puntapié inicial para el debate de un tema sensible  que trasciende a este mercado y que son las fianzas incondicionales o a primer requerimiento. Días intensos con pocas conclusiones y decididamente un convite a la reflexión y trabajo en pos de esta actividad.