El Sistema de Riesgos del Trabajo se está ocupando de dos núcleos de servicios: la prevención de los accidentes y enfermedades y, en caso de que ocurran, la atención integral del trabajador damnificado, según un artículo de la última edición del Boletín de la UART. (ver boletín)
En cuanto a prevención, la tarea de empleadores, ART, trabajadores y del Estado (fiscalizando y regulando), junto a diferentes herramientas que tiene el sistema de RT permite exhibir a 2014 una caída del 68% en el índice de fallecidos y una caída del 34% en el índice de accidentes.
Respecto de la atención integral ante el acaecimiento de un infortunio laboral, la reparación prevista en la LRT y sus modificatorias pone foco en las necesidades del trabajador accidentado. Motivo por el cual, se prevén prestaciones dinerarias como así también un espectro amplio e integral de prestaciones en especie, cuyo objetivo primordial es devolver al trabajador el mejor estado de salud posible.
Por el lado de las prestaciones en especie, las ART brindan la asistencia médica integral desde el mismo momento de producido el accidente hasta el alta laboral definitiva o, en el caso de accidentes graves con lesiones permanentes, las prestaciones se brindan de por vida.
A ello se suman, en caso de ser necesario, las etapas de rehabilitación y de recalificación y reubicación laboral. En el primer caso, se busca recuperar la capacidad funcional del trabajador a fin de alcanzar su estado previo al accidente.
Es importante remarcar que en el año 2014, las ART han brindado cerca de 6 millones de prestaciones asistenciales, 390.000 trabajadores fueron rehabilitados y 11.000 han sido recalificados.
Por último, desde el inicio del Sistema las ART han trabajado para dar a los trabajadores accidentados el mejor servicio, ampliando su red de prestadores con profesionales destacados y centros de salud avanzados, de forma tal de brindar al damnificado buenas condiciones para la atención de urgencias, tratamientos y rehabilitaciones.
